El deficiente argumento de Jesús para justificar a sus discípulos (Mt 12,1-8).

En una entrada anterior vimos que uno de los argumentos de Jesús para
justificar la violación del sábado por sus discípulos cuando estos arrancan las
espigas del campo para comerlas (Mt 12,1-8) es lo que hizo David y los suyos
cuando estaban hambrientos: “¿No han
leído lo que hizo David y sus compañeros cuando estaban hambrientos? 12,4:
Entraron en la casa de Dios y comieron los panes consagrados que no les estaba
permitido comer ni a él ni a sus compañeros, sino solamente a los sacerdotes
”.  El texto en cuestión es 1Sam 21,2-10, el que plantea la historia en términos bastante
distintos al de Jesús en Mateo. De acuerdo al texto bíblico David está escapando del Rey Saúl que le busca para matarle.
David está sólo cuando llega al templo de Nob, y sólo él recibe los panes de la
presencia para alimentarse.  La mención a
los compañeros está ausente en el relato veterotestamentario ( 4QSam, los LXX o
en el MT), lo que le quita fuerza al argumento de Jesús que los menciona para
justificar a sus discípulos.  La soledad de David se enfatiza cuando el
sacerdote que le encuentra le pregunta: “¿Por
qué vienes solo, sin nadie que te acompañe?”
(1Sam 21,2). Mencionemos también que el texto nunca
dice que David estuviese hambriento, como argumenta Jesús, y menos aún que  comiese estos panes destinados para los
sacerdotes. Bien pudo haberlos guardado para las jornadas sucesivas. Y lo que
es aún peor, en ninguna parte se menciona que David haya pedido estos panes consagrados
en sábado. ¿Por qué Jesús estaría citando un texto veterotestamentario de
manera tan deficiente para la defensa de sus argumentos?

Personalmente no creo que esto sea
reflejo de una inconsistencia mateana (o marcana) en la manera de lidiar con
las escrituras. Yo creo que Mateo está citando la Ley oral, es decir
tradiciones que no se encontraban en los textos escritos (y que los rabinos
pondrían más tarde por escrito), pero que se transmitían de generación a
generación de forma oral. Lo que está de fondo es Lv 24,5-8 que nos dice que
los panes de la presencia se preparaban cada sábado. De acuerdo al Yalkut
Shimeoni II, 130 de 1Sam 21,5 el acontecimiento sucedió en el sábado y , lo que
es más importante, la vida de David y 
sus hombres estaban en peligro porque estaban sufriendo mucha hambre.
Tanto es así, que la historia dice que tan grande era el hambre de David que
éste comió una gran cantidad de panes: porque
él sólo encontró pan de la presencia en la Casa de Dios, David le dijo: “Dame
algo para comer para no morir de hambre. El preservar la vida es más importante
que el Sábado”.
Algunos exegetas dicen que el texto del Yalkut es demasiado
tardío para comprobar que Mateo lo conocía. Me parece que la argumentación es
la contraria, el uso que hace Mateo de esta historia demuestra que ésta era
bastante antigua, y que solo posteriormente se pondría por escrito por el autor
del Yalkut. Jesús, como los fariseos, reconocía y valoraba las tradiciones orales. Para más detalles: Brand H. Young, Jesus the Jewish Theologian, p.
104-108.

Tomás García-Huidobro

Sacerdote Jesuita, Doctor en Teología Bíblica.