El Mesías ben José en el Pesikta Rabbati

En el Pesikta Rabbati, específicamente en el piskas 36 y 37 también encontramos aluciones al mesías ben José. En estos textos de la época tanaítica se relata un acuerdo entre Dios y el mesías antes que éste último fuese revelado. 36.¿Qué siginifica que «en tu luz nosotros vemos la luz» (Salm 36,9)? ¿ Cuál es la luz que la congregación de Israel busca desde una atalaya? Esta es la luz del Mesías, como esta dicho » y Dios vio que la luz era buena» (Gn 1,4). Este versículo prueba que el Santo, bendito sea, contempló al Mesías y su trabajo antes que el mundo fuese creado, y entonces escondió a su Mesías bajo el trono de gloria hasta la generación donde tenga que aparecer.

Satán dijo delante del Santo: «Maestro del universo, ¿por quién es la luz que  que se guarda debajo de tu trono de Gloria?. Dios respondió: «Para él quien te hará retroceder y te pondrá en vergüenza. Satán dijo: Maestro del universo, muestramelo. Dios respondió: Ven y contempladlo. Y cuando él lo vio, Satan tembló, y cayó sobre su rostro y dijo: «Seguramente este es el Mesías que será la causa que yo y todos los príncipes de las naciones seamos tragados en Gehena, como está dicho «El consumirá a la muerte definitivamente. Enjugará el Señor Dios las lágrimas de todos los rostros (Is 25,8). 

En esa hora los principes de las naciones, agitados, le dirán: «Maestro del Universo,¿quién es éste que a través de su poder nosotros somos tragados? ¿Cuál es su nombre? ¿Qué tipo de ser es él? El Santo , bendito sea, responderá: Él el esl Mesías y su nombre es el Mesías Efraim Tsidqi, quien se va a levantar a sí mismo y levantará a su generación, y quien va a dar la luz a los ojos de Israel y va a liberar a su pueblo; y no habrá nacion ni pueblo que pueda oponersele, como está dicho, «el enemigo no le hará violencia, no el hijo de la maldad le hará daño» (Salm 89,22). Y todos sus enemigos y adversarios serán derrotados delante de él, como esta dicho: «Yo haré pedazos a sus adversarios delante de él» (Salm 89,23). E incluso los mares y ríos van a detener su curso, como está dicho: «pondré su mano sobre el mar, sobre los ríos su derech» (Salm 89,26).

El Santo, bendito sea, hiso un acuerdo con el Mesías Efraím. Él dijo: «Aquellos cuyos pecados estan almacenados contigo, te llevarán con un yugo de hierro y harán de tí algo semejante a un cordero cuyos ojos nublados por el dolor. Ellos forzarán tu espíritu con ese yugo, y por sus pecados «tu lengua se unirá a tus mandíbulas»(Salm 22,15). ¿Estás dispuesto a esto?. El Mesías le preguntará al Santo, bendito sea: ¿Durará mi sufrimiento muchos años? El Santo, bendito sea, responderá: Sobre tu vida y la vida sobre mi cabeza, este será un período de siete años que he decretado para ti. Pero si tu alma es triste por la perspectiva de sufrimiento, yo lo eliminaré inmediatamente. Él replicó en su presencia: Maestro del Universo, con alegría del alma y regocijo del corazón yo tomo sobre mi todo esto, con la condición de que ninguna persona vaya a perecer en Israel. Y no solo los vivos se salvarán en mis dias, sino que también los muertos, aquellos que murieron desde el tiempo de Adán hasta el tiempo de la redención, y no sólo aquellos que se salvarán en mis días, sino también aquellos que nacieron muertos, y no solo aquellos que se salvarán en mis días, sino aquellos que no fueron creados. Estas son las cosas que yo deseo, y por ellas yo estoy dispuesto de tomar sobre mí cualquiera de tus decretos.

En el septenario cuando David venga, traerá rayos de hierro  y los cargará sobre su cuello hasta que él se doble…A próposito de este tiempo, David se lamenta y dice, «mi fuerza se seca como un fragmento de vasija» etc (Salm 22, 15). En aquel tiempo el Santo, bendito sea, dijo: Efraím, Mesías Tsidqi, desde la antiguedad tu has tomasdo sobre ti mismo todo esto, desde entonces cada seis días de la creación…

37,2.Se enseña que los Padres Eternos  van a ascender en el mes del Nisan y le dirán: «Efraím, Mesías Tsidqenu, a pesar que nosotros somos tus ancestros, tú eres más grande que nosotros, porque tu cargas los pecados y horribles sufrimientos en vez de nosotros, lo que significa la expiación desde la más temprana a la última generación. Entre los pueblos de la tierra tu has llegado a ser escarnio y burla en beneficio de Israel. Tú te sentaste en la oscuridad y tristeza, tus ojos no vieron la luz. Tu piel se pego a tus huesos (Salm 22,17) y tu cuerpo estaba seco como madera. Tus ojos estaban obscuros  del ayuno y tu fuerza se secó como un tiesto (Salm 22,15). Todo esto sucedió porque las iniquidades de nuestro hijos, y porque tu sentías placer que nuestros hijos pudiesen ser beneficiados por la abundancia del Santo, bendito sea, que sean concedidas sobre Israel. Sin embargo, puede ser por la angustia que tú sufriste en su cuenta, especialmente porque ellos te encadenaron en la prisión, que tu estás disgustado con ellos.

Él va a responder: Eternos Padres, todo lo que he hecho lo he hecho en beneficio vuestro y de vuestros hijos, por vuestra gloria y la gloria de vuestros hijos, para que se beneficien  de la abundancia que el Santo, bendito sea, va a conceder sobre Israel. Los Padres Eternos dijeron: Efraím Mesías Tsidqenu, estad contento con lo que has hecho porque has alegrado la mente de tu Hacedor y nuestra mente también.

R. Shimon ben Pazi enseñó. al tiempo que el Santo, bendito sea, va a levantar al Mesías a los cielos de los cielos, y lo va a vestir  en el esplendor de su propia gloria, por el beneficio de las naciones de la tierra y por los malvados persas. Fue dicho a él, Efraín Mesías Tsidkenu será el juez de estos y hará con ello lo que vuestras almas deseen. Porque sin misericordia ellos han triunfado sobre ti y pronto vendrá tu fin sobre la tierra…

Una misericordia se refiere al tiempo cuando el yacia en prisión, un tiempo cuando las naciones de la tierra van a rechinar los dientes cada dia, parpadear sus ojos uno a otro como escarnio de él,  asienten con la cabeza hacia él con desprecio, abriran salvajemente sus labios de carcajadas, como está dicho: «al verme se burlan de mí,hacen muecas, menean la cabeza» (Salm 22,8), «mi garganta está seca como una teja,la lengua pegada al paladar.¡Me hundes en el polvo de la muerte!» (Salm 22,16). Más aún, ellos rugirán contra él como leones como está dicho: «abren contra mí sus fauces:leones que descuartizan y rugen.
Me derramo como agua, se me descoyuntan los huesos; mi corazón, como cera, se derrite en mi interior; (Salm 22, 14-15).

La historia que está detras es la desgracia que recayó sobre José a causa de sus hermanos. Sin embargo los sufrimientos de Jose expiaron por los pecados de aquellos que lo hicieron sufrir. Entonces, Efraín el mesías será exaltado sobre los cielos, sus vestidos serán de gloria, y será el Señor de todas las naciones. Es interesante en este texto el hecho de la preexistencia del Mesías, como en el caso de Jn o Enoc 48, 1-10, pero con la particularidad de que éste acepta con anticipación sus sufrimientos futuros, sabiendo que con esto vendra la expiación de los pecados, la destrucción de la muerte y la confusión de Satán.

 

Tomás García-Huidobro

Sacerdote Jesuita, Doctor en Teología Bíblica.