Astronomía y Fe…preguntas desde Novosibirsk

El viernes
6 de Enero, la Biblioteca y el Centro Cultural Iñigo presentó una conferencia
sobre astronomía y fe a cargo del director del Observatorio Vaticano, José
Funes sj. A pesar de algunos defectos (la sala de conferencias se hizo
pequeña), el resultado fue muy bueno. La mitad del auditorio eran personas que
no tenían ningún vínculo (o formal) con la Iglesia Ortodoxa o Católica.
Personas vinculadas exclusivamente con el mundo de la ciencia, herederas de una
visión materialista-marxista. La misma presencia del director del Observatorio
Vaticano en la ciudad fue un gran plus a la imagen de la Iglesia Católica que
se mostró como una organización en dialogo con la ciencia. Para el Centro
Cultural también significó un gran impulso.
A nivel
más humano me gustó mucho compartir con el P. José. Una persona encantadora. Da
gusto sentirse parte de un cuerpo de jesuitas que se apoya desde distintas
partes del mundo. Me da la impresión que a futuro podemos seguir haciendo cosas
juntos, el Observatorio Vaticano y nuestro pequeño centro cultural.
Las
preguntas de la gente después de la conferencia me hicieron descubrir un
aspecto nuevo de este misterio que es la cultura rusa. Creo que en Europa las
preguntas hubiesen tendido a expresar el conflicto entre una cultura secular y
una no secular. Las inquietudes en Europa tenderían a enfatizar la no necesidad
de la espiritualidad de parte de la ciencia. En definitiva, ¿para qué es
necesaria la premisa “Dios” en la investigación científica? En la Rusia
post-comunista el conflicto no se encuentra entre una sociedad secularizada o
no, sino más bien entre una concepción materialista o idealista de la sociedad
y de la vida en general. Me dio la impresión que el tema es la trascendencia
del materialismo hacia una concepción idealista de tipo holística, cuasi
mística. No es el trascender la idea de Dios, sino precisamente lo
contrario…encontrar una visión unificadora (como en su tiempo lo fue el
marxismo) que de sentido a todo lo que nos rodea, una visión espiritual, cuasi
mística. Fue interesante también constatar que esta visión no nacería de una
síntesis personal, sino que tendría que ser dada desde afuera (por el Vaticano,
por la Iglesia, por alguna autoridad tipo Zar). Y es que, de nuevo, la idea de
persona (o más bien, individuo) en esta cultura se distingue mucho de  lo que entendemos en Occidente.

En fin,
seguimos trabajando duro para ir cuajando este dialogo entre cultura y fe…

Tomás García-Huidobro

Sacerdote Jesuita, Doctor en Teología Bíblica.