Los sueños de José (I): Freud en el divan…
Siempre me ha llamado la atención el mundo de los sueños. Cuando dormimos somos totalmente indefensos ante el mundo exterior suspendiendo nuestra manera acostumbrada de relacionarnos con la realidad. Entonces todo parece trastocarse…figuras oníricas adquieren vida, nos volvemos a encontrar con personas y con situaciones de un pasado lejano, somos capaces de hacer cosas que no hubiesemos pensado como volar y matar…¿Qué sucede cuando soñamos? Hace no mucho vi un documental de la PBS ( http://www.pbs.org/wgbh/nova/sciencenow/3410/01.html )que basicamente decía que el dormir era necesario para fortalecer la memoria en un proceso constante y cotidiano de aprendizaje. Esta es una explicación que da mucho sentido no sólo porque la avalan estudios científicos serios, sino porque después de todo en nuestra cultura el soñar lo asociamos con un proceso biológico o psíquico natural. Si esta es nuestra manera moderna de relacionarnos con los sueños…resulta curioso que muchos creyentes lean en el Evangelio de Mateo como Dios se comunica con José a través de sus sueños y no se cuestionen a lo menos su validez epistemológica.
¿Qué son los sueños en el caso de José? ¿Es que acaso Dios se comunica en sueños?
En el relato de la infancia de Jesús según Mateo, José tiene tres sueños que son fundamentales y que van a definir radicalmente los acontecimientos. En cada uno de estos sueños el ángel del Señor se le aparece, y junto con explicarle lo que está sucediendo le indica qué es lo que tiene que hacer. Cada uno de estos sueños son experiencias religiosas. En el mundo antiguo se creía que los dioses se comunicaban con los hombres a través de algunos sueños significativo. Por decirlo de alguna manera, José no era el único que recibía mensajes divinos mediante sus sueños.Por citar sólo un ejemplo: el templo de Aslepius era famoso no sólo por sus adiviciones sino también porque los dioses sanaban y se comunicaban con los que dormían allí. Conocemos el caso de un niño llamado Eufanes que sufría de cálculos renales y que durmiendo allí tuvo un encuentro con un dios con el cual «negociará» su sanación:
«Eufanes, un niño de Epidauro. Él ha sufrido de cálculo renal y ha dormido en la habitación de la sanación. Entonces ha soñado que el dios se ha colocado en frente y le ha dicho: ´¿Qué es lo que tú me darás si te sano?´ El niño dijo: ´Yo haré sonar mis dedos diez veces´. El dios se rio y le prometió que le liberaría de sus dolencias. Cuando el día vino, la enfermedad había desaparecido”.
¿Qué es lo que hace que los sueños de José sean distintos a nuestros sueños? El valor que le adjudica el grupo al que pertenece el individuo. En la palestina del siglo I, cuando una persona tenía un sueño significativo la gente decía que era Dios quien se estaba comunicando. En otras palabras, la comunidad le da valor religioso a la experiencia de soñar.En el mundo occidental del siglo XXI, los sueños son una manera que tiene nuestro organismo de asimilar el conocimiento necesario para sobrevivir de manera eficaz. Nadie diría, por lo menos públicamente, que Dios le dijo algo importante en un sueño.
¿Es que ya Dios nunca más se comunicará con nosotros a través de los sueños? Si al menos Dios no…¿por qué no abrir las puertas a la comunicación con los ángeles, hadas, o duendes? Al menos nuestro mundo onírico sería más estimulante…