El segundo apocalipsis en las Hejalot Rabbati
El segundo apocalipsis presente en las Hejalot Rabbati (&130-138) presenta dos aspectos característicos. Por una parte, se responde a las preguntas que R. Ismael plantea a través de un peculiar sistema de cálculos. Así, por ejemplo, Cuando pregunta: “¿Puede ser revelado el fin de este reino malvado?”. Escucha una voz viniendo y diciendo: “Mi amigo Ismael, al final del cumplimiento de los 700 años, desde la construcción de la casa que fue construida por la autoridad de los reyes de Persia, todas las cosas llegarán a su fin, y todas finalmente cesarán de la faz de la tierra y todo será limpio de inequidades. Incluso si ellos me abandonasen 700 años y sirviesen a Baalim, entonces Yo, incluso voy a les dejaré y los abandonaré a la manos del cruel por 700 años. Y entonces no habrá para ellos salvador, ni sacerdote, ni maestro, ni profeta, ni rey, ni leader, ni príncipe hasta que no retornen a mí en oración y suplicación por misericordia. Sin embargo, si ellos buscan Mi Rostro, yo los encontraré y les devolveré a su tierra” (&134).
Por otra parte, y tal como leímos en este texto, otro motivo fundamental está en la necesidad de arrepentimiento como requisito para recibir la redención de Dios. Otro ejemplo lo encontramos cuando Ismael pregunta: “¿Y si ellos no se arrepienten, es que acaso nunca serán redimidos? El me dijo: “Yo pondré sobre ellos un rey cuyos decretos serán tan duros como los de Haman, y ellos se volverán hacia mi contra su voluntad (Dn 8,23). Esto será así: un rey de rostro fiero y de entendimiento obscuro (Dn 7,25). Y el hablará palabras contra el Altísimo, y jurará sobre los santos del Altísimo, y el pensará cambiar los tiempos y la ley; y en sus manos se les dará a ellos hasta el tiempo y el tiempo y la mitad del tiempo” (&135). Más adelante Ismael añade: “Y yo busqué en los libros que Daniel había cerrado y sellado, y encontré escrito en ellos: 700 años fueron determinados y decretados sobre tu pueblo y sobre la ciudad santa y cuando se cumplan cesarán todos los trasgresores y terminarán todos los pecadores y la iniquidad del pueblo pequeño será expiada y Él que es eternamente justo traerá al Mesías que ha permanecido oculto y sellado de la luz de todos los profetas y el será ungido como el santo de los santos (&136).