Hoja de ruta para comenzar con la mística judía
Estoy leyendo un libro muy bueno, su autora es Melila Hellner-Eshed, y el título es: A river Flows from Eden, The language of Mystical Experience in the Zohar. Con un lenguaje sugestivo, la autora acerca al público no especializado toda la profundidad y fuerza del tratado místico judío medieval. Me ha fascinado cómo la experiencia erótica entre lo femenino y lo masculino es un puente fundamental en la experiencia de Dios. Me encantaría profundizar en la mística judía…desgraciadamente sólo he podido estudiar a vuelo de pájaro hasta la literatura de Hejalot, sin ni siquiera poder estudiar bien lo concerniente a los 32 senderos de sabiduría a través de los cuales Dios creó, y la influencia del Cantar de los cantares. Sin embargo, este asomarme a la mística judía medieval española con la Zohar ha sido una aventura fascinante. En esta entrada sugiero algunos puntos que creo que son importantes y básicos en este caminar por el estudio de la mística judía.
La larga tradición mística judía hunde sus raíces en textos bíblicos como Isaías 6,1-13; 11, 1-10 (donde se relaciona al mesías con la sabiduría y el entendimiento); Ez 1,1-28; 37, 1-14 (donde no habla de la resurrección sino de lo que provoca la acción del espíritu); Zac 1,7-20; 2,1-5; 3, 1-10; 4, 1-14; 5, 11; 6,1-14; Dn 7, 1-28; 10,1-14; 12, 1-13 (también los sabios de la zohar van a brillar y resplandecer de sabiduría).
También es importante estudiar los siguientes temas que apuntan a la mediación entre Dios y los hombres (he estudiado algo de eso en entradas anteriores): en la literatura sapiencial, la sabiduría; en la literatura apócrifa y apocalíptica, la figura de Henoc y Metatrón; en Filón de Alejandría, el logos; en la literatura del Qumrán, el Maestro de la Justicia; en el Nuevo Testamento, el Logos; en la literatura rabínica, la Shejiná o Divina Presencia; y la cosmografía de la sabiduría divina revelada de la Séfer Yetzirá (ver especialmente, I, 1-10; II, 1-2; VI,1-2). Desde aquí, intuyo, se abre todo un campo amplio y fascinante de relaciones entre mesianismo y misticismo que habría que profundizar….también en el significado del Reinado de Dios para Jesús y su relación con la Mercabá.
Del Talmud vale la pena mirar: Mishná Jaguigá 2,1; Talmud Bavli, Jaguigá, 14,b; Talmud Bavli, Sanhedrín 65b; Talmud Bavli, Berajot 55a. En los textos antiguos del místicismo judío cabe la pena mirar el Ma´ase Bereshit (Narración de la Creación según Génesis); Ma´ase Merkavá (Narración de la visión de Ezekiel).
Luego mirar cómo se desarrolla el período gaónico bajo el islam en oriente, y el desarrollo de la literatura de Hejalot donde destaca Hejalot Rabati (XV, 1-2; XVI, 1.4; XXVI, 1-2), Séfer Hejlot o Libro de los palacios (I, 1-6; IV, 1-2; XII,5; X, 1-2; XI, 1; XVI 1-4; XLIV, 7-10; LV 1). Luego se desarrolla el puente italiano con la magia y el esoterismo, donde destaca: Shabtai Donnolo, Séfer Jajmoni (Comentario al libro de la Creación, siglo X, Otranto, Italia); Séfer Yujasín, (la crónica de Ahima´atz ben Paltiel, Oria, Italia, 1054). Luego el pietismo alemán, bajo el cristianismo en occidente; y el período entre aromas sensuales, oriente en occidente, en el sur de España donde surge el Zohar.
También para entrender la Zohar (Séfer Ha-Zohar, el libro del resplandor) vale la pena contextualizarla en relación a la Kabala, el Zeitgeist del siglo XII y su presencia en la Provenza, el Languedoc y Cataluña; el Séfer Ha-Bahir (el libro de la claridad); el mito luriánico o a juntar las chispas divinas que hubo explosición; el Jasidismo o la alegría interior por la tristeza exterior traerá la redención.